Durante años la inteligencia de los "greiscolenses" estaba en duda. El parecido físico entre el Príncipe Adam y He-Man era extraordinario. Mismo peluquero, tono de voz e iguales calzones. Cada vez que aparecía un problema en el reino, una y otra vez, desaparecía Adam y entraba He-Man. Se entendía que Adam era el cagón del pueblo; He-Man el valiente. Pero increíblemente los pequeños detalles se le escapan a los más astutos. Todo comenzó con una factura de celular del Príncipe Adam que fué a pagar He-Man. Luego una multa por exceso de velocidad de He-Man, donde el Príncipe Adam se presentó a declarar ante el juez. Estos hechos levantaron grandes sospechas. Hasta una investigación minuciosa que delataba que He-Man jamás se había presentado a votar en las elecciones del reino. Este incidente despertó indignación y escándalo en todo el pueblo de Greiscol. El Príncipe Adam, asesorado por sus abogados, se vió obligado a organizar una rueda de prensa donde declaró que él y He-Man eran casi la misma persona. Una doble vida, que supo tener durante décadas, cayó.
Ya hay sospechas varias entre Superman y Clark Kent. Ampliaremos
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